La leche materna es el alimento más nutritivo y el que puede proteger al bebé de muchas enfermedades.
No se ha demostrado la transmisión del virus a través de la leche humana. Por lo tanto, no dejes de amamantar a tu hijo.
En cuanto al uso de tapabocas, te sugerimos seguir las recomendaciones generales para toda la población.
Según las recomendaciones internacionales (Organización Mundial de la Salud) las madres con sospecha o enfermedad confirmada por COVID-19, pueden optar por seguir amamantando a sus bebés o darles la leche que se han extraído, extremando las medidas de higiene y protección, es decir, utilizando barbijo y lavándose las manos antes y después de tocar al bebé.
El principal riesgo para los lactantes alimentados a pecho es el contacto con las secreciones respiratorias de la madre. Por eso es importante seguir las siguientes pautas de cuidado para una lactancia segura:
Si vos o tu bebé tienen fiebre, tos o dificultad para respirar, llamá al médico de inmediato.