La docencia es uno de los pilares de la excelencia médica. Por eso, Clínica Zabala mantiene un fuerte compromiso con la formación integral de sus profesionales. A continuación, encontrará las actividades de actualización para el cuerpo médico de la Institución.
La práctica clínica nuclea una problemática humana, social y vincular compleja.
No sólo el paciente se encuentra en una situación de vulnerabilidad, sino también el profesional de la salud, quien está expuesto al desgate emocional de la práctica cotidiana.
Nadie duda de la importancia de los avances tecnológicos, pero más allá de los adelantos biomédicos, la relación médico-paciente ha sufrido modificaciones que generan malestar e insatisfacción en ambas partes.
El paciente exige excelencia técnica pero termina definiendo su nivel de satisfacción por la calidad humana de la atención que recibe.
La dimensión humana de la práctica médica debe estar siempre presente, con independencia del marco tecnológico en que se desarrolle y es un factor a tener en cuenta a la hora de evaluar la calidad de la gestión.
Es difícil reflexionar sobre la práctica de la medicina sin recurrir al ámbito de las Humanidades Médicas, que promueven la sensibilización del médico sobre la complejidad de su quehacer cotidiano.
Ese ensanchamiento del campo clínico le permite no sólo conocer al otro y acompañarlo mejor en el proceso, sino también reconocer los factores sociales y culturales involucrados en la atención de la salud, que condicionan sus comportamientos y respuestas e influyen en sus vivencias en la gestión profesional.
Por eso, desarrollamos un espacio mensual de reflexión y debate donde los profesionales puedan repensar el quehacer cotidiano desde otras perspectivas y replantearse sus experiencias en un ámbito de expresión seguro y sin condicionamientos.